MENSAJE DEL GRAN DIRECTOR DIVINO, Canalizado por José
Gabriel Agesta.
"Queridos Aspirantes a la Quinta Dimensión: Yo fuí
quien los inició en este camino de Luz, cuando ustedes ni siquiera eran
conscientes de él. Mi mayor deseo es devolverles la ilusión de vivir.
Queridos Míos: la mayor injusticia que pueden cometer contra
ustedes mismos es no creér en su propio poder. Cuando no créen en ustedes,
tampoco créen en mí, y los milagros se desvanécen.
El Alma desea ardientemente aquéllo que ustedes han
anhelado, pero que no se ha cristalizado porque tienen enlaces karmicos que no
se han disuelto del todo. Alégrense porque he venido a librarlos de la oscuridad.
Hay entidades que les han causado gran dolor durante varias encarnaciones, y
por eso hay tanto sufrimiento en sus vidas.
Yo inicié anónimamente su despertar, pero ustedes no me
reconocieron. Cuanto más hundidos estaban, yo llegaba con ayuda, pero ustedes
estaban congelados en la angustia.
Porque los amo inmensamente les revelo estas verdades y les
manifiesto que no los he abandonado ni un momento. Así como he sido un Mentor
para Jesús y Saint Germain, también soy un Mentor para ustedes.
Ustedes, como les decía han estado atados a otros seres que
los han maltratado a lo largo y ancho de varias existencias. Están luchando
para romper una dependencia antigua. Les ofrezco pues una oportunidad para ser
libres en esta vida.
Así como el Santo Guerrero Gurú Gobinda es el Portador de la
Espada Cósmica, yo soy el portador de la Espada Violeta. Vamos a trabajar con
mi regalo Amados Aspirantes a la Quinta Dimensión.
Tómen mi espada y con el poder de su intención extírpen la
conexión que los mantiene unidos a esas personas. Acto seguido, llámen a la
Divina Misericordia para que ponga sobre ustedes la Rosa Dorada de Oasibeth.
Así se curarán sus heridas y detendrán las provocaciones y las agresiones de
estos antiguos rivales kármicos. Mi espada tiene múltiples usos, que ya les iré
inspirando a cada uno.
Invíten a la Madre Divina para que sea la Reina de sus
vidas, y permanézcan en el amor, cerrando esos capítulos de dolor y miedo.
Siéntan mi presencia luminosa que consume las tinieblas. Que
esta encarnación sea el último peldaño en la escalera de regreso a su Hogar
Divino.
Que la Presencia Yo Soy sea su música callada. Las palabras se
escríben como en el idioma inglés, pero se pronuncian "Yo Soy", juntas,
así como suénan. Obsérven la semejanza entre "Yo Soy" Y
"Yo Soy". Esta última palabra es un sonido Sagrado de la Divina Madre.
Yo soy el que Ustedes lláman el Divino Director, la
Autoridad sobre todas las corrientes de vida, su Maestro y servidor."
*Mensaje canalizado por José Gabriel Uribe (Agesta).
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