Bienvenido seas a este espacio para el reencuentro del ser. Nada es casualidad, no hay accidentes en el mundo de la voluntad. Por eso celebro y bendigo esta magica sincronia, y elijo creer que el universo nos permitió crear este lazo. Es hora de despertar, las energías del viejo mundo han quedado atrás y el Nuevo Mundo te exige vivir en conciencia, armonia y amor. Que fluya el conocimiento! Que es la llave de la libertad!
Cuando el entorno se vuelve áspero y sentimos decaer, es
tiempo de agradecer por aquello que somos, hacemos y tenemos, que por alguna
condición externa nos hace olvidar la dicha de ser quienes somos y solo nos
deja ver un panorama borroso. Al levantarte y al acostarte agradece por lo que
hoy ha sucedido y deja fluir.
“Padre/Madre Universal, te doy gracias por este día.
Te agradezco mi perfecta salud
Agradezco toda mi alegría
Agradezco la oportunidad de saber más
Te agradezco los bienes y bendiciones que he recibido
Agradezco la armonía de mi hogar.
Agradezco mi crecimiento.
Agradezco lo que voy a recibir.
Hoy actitud de agradecimiento me abre los portales que me conducen a una vida próspera y abundante.
Gracias, Padre/Madre Universal, por este día tan
extraordinario
Gracias por los árboles
Gracias por el azul del cielo
Gracias por la naturaleza, las plantas y los animales
Gracias por mi cuerpo.
Gracias por la dicha de ver, oír, sentir, saborear y tocar,
Gracias por mi casa
Gracias por mis familiares y amigos
Gracias por mi comunidad
Gracias por mi país
Gracias por mi planeta
Gracias por mi trabajo
Gracias por mi negocio
Gracias por mis ingresos ilimitados
Gracias por mis talentos y capacidades
Gracias a mis experiencias pasadas porqué me han hecho más
fuerte
Gracias por el día de hoy y por todas las mañanas que han de
venir.
Agradezco y acepto todo el bien que me ofrece la vida. Gracias Divinidad, Gracias Padre/Madre Universal, Gracias a la Mente Absoluta.”
Hacer un llamado a la Ley del Perdón, es cumplir con el
Edicto Divino por medio del cual un individuo puede obtener la remisión de sus
propias transgresiones personales de la Ley de la Vida, o la de cualquier otra
vida para la cual él quiera pedirle. La aplicación del Perdón es sencilla en
extremo, porque significa purgar el alma de todo Karma imperfecto como
preparación para la completa sumisión del ser externo al Cristo Interno.
Primero deberas invocar la Presencia Divina “YO
SOY, y luego a uno o más de los Seres Divinos del Séptimo Rayo, el cual es el
Rayo de la Misericordia y el Perdón. Después debe pedir la transmutación o
cambio de todas las imperfecciones conocidas o desconocidas a la Perfección de
alguna Cualidad o Virtud de DIOS.
La Ley del Perdón debe siempre anteceder cualquier forma de
Decreto hecho por un individuo o grupo:
“APRENDER A PERDONAR, ES APRENDER A EVOLUCIONAR”.
EL RITUAL DE LA LEY DEL PERDÓN
*Atención: Este ritual es MUY poderoso y actúa directamente
en nuestro Ser y en nuestro camino, por lo tanto, debe realizarse cuando
REALMENTE se sienta en el interior y cuando veamos que es el momento, no por la
sencilla razón de estar expuesto aquí debe usarse a la ligera y sin
responsabilidad.
Adecuado para liberar energías que nos tienen atados y que
no nos permiten evolucionar, son varias las emociones que podemos sentir, entre
ellas:
* Culpas, (yo no me siento merecedor de…)
* Sentimientos de inferioridad (mi padre-madre no me han
valorado suficiente en mi niñez).
* Resentimientos, y dolor (me he sentido tratado injustamente…).
* Dificultad de relacionarse adecuadamente, con la pareja
(revisar la relación con padre-madre y liberarla a través del perdón), etc;
Premisas básicas antes de cualquier ritual:
Encender una vela blanca o de color violeta (color de la transmutacion), y un incienso, el que gustes y tengas a la mano.
Abrir el ejercicio con el mudra de alineamiento: Mano
izquierda, dedos índice y pulgar juntos.
"...Yo soy equilibrio en acción. Pido energía de purificación.
Abro mi canal a la Luz. Pido a mi vehículo superior que tome el mando de mis
vehículos inferiores par hacer este ejercicio."
(Visualizo a la persona delante de mi y detrás de ella el
Consejo de Ancianos o Tribunal Kármico).
"...Yo invoco a la Ley del Perdón y a través de ella yo te pido
perdón:……por todo pensamiento, sentimiento, palabra o acción incorrectos
emitidos hacia ti y por todo daño que te haya causado en ésta o en otras vidas."
(Hacer una pausa y observar si hay alguna sensación o
molestia en el cuerpo, porque se están liberando las energías de limpieza, si
la hay pasar la mano como recogiéndola y limpiarla sobre el fuego de la vela
para purificarla).
"...Yo invoco a la Ley del Perdón y a través de ella yo te
perdono:….. por todo pensamiento, sentimiento, palabra o acción incorrectos que
hayas emitido hacía mi y por todo daño que me hayas causado en ésta o en otras
vidas."
(Hacer una pausa y observar si hay alguna sensación o
molestia en el cuerpo, porque se están liberando las energías de limpieza, si
la hay pasar la mano como recogiéndola y limpiarla sobre el fuego de la vela
para purificarla).
Yo invoco a la Ley del Perdón y a través de ella yo me
perdono: a mi mismo/a por todo pensamiento, sentimiento, palabra o acción
incorrectos que haya emitido hacia:……..y hacia mí mismo/a y por todo el daño
que le haya causado y me haya causado en ésta o en otras vidas.
(Hacer una pausa y observar si hay alguna sensación o
molestia en el cuerpo, porque se están liberando las energías de limpieza, si
la hay pasar la mano como recogiéndola y limpiarla sobre el fuego de la vela
para purificarla).
"....Yo te doy la libertad y me libero de mi mismo/a y pongo en
manos del Consejo Kármico nuestra situación. Gracias por todo lo que he aprendido de ti y de nuestra
relación."
(Visualizar el símbolo del infinito 8 entre los dos en color
violeta y luego luz dorada que nos baña a los dos.)
Cerrar el ejercicio con el mudra del alineamiento: Mano
derecha, dedos índice y pulgar juntos.
Por ultimo, recita el decreto de la llama violeta
DECRETO DE LA LLAMA VIOLETA:
"YO SOY LA LEY DEL PERDÓN Y DEL OLVIDO
Y LA LLAMA VIOLETA TRANSMUTADORA
QUE CONSUME Y DISUELVE TODOS LOS ERRORES
COMETIDOS POR MÍ, A TRAVÉS DE TODAS MIS VIDAS
YO SOY LA LEY DEL PERDÓN Y DEL OLVIDO
Y LA LLAMA VIOLETA TRANSMUTADORA,
QUE CONSUME Y DISUELVE TODOS LOS ERRORES
COMETIDOS POR LA HUMANIDAD A
TRAVÉS DE TODOS LOS TIEMPOS.
YO SOY LA LEY DEL PERDÓN Y DEL OLVIDO
Y LA LLAMA VIOLETA TRANSMUTADORA
QUE CONSUME Y DISUELVE TODOS
LOS ERRORES DE LOS SERES QUE
SE ENCUENTRAN DESENCARNADOS."
Gracias Padre, que nos has escuchado.
*Fuente y cortesia de la nota, decreto tomado de:
haciaeldespertar.org
“Tras la muerte seguimos el viaje”, Entrevista a Paloma Navarrete.
Paloma Navarrete, psicóloga, farmacéutica, vidente y médium
70 años. De Santander, vivo en Madrid. Licenciada en
Farmacia y Psicología. Divorciada, con hijas y nietas. Investigo plantas
aromáticas en el Instituto Nacional de Investigaciones Agrarias. Vivimos un
cambio de civilización. La conciencia individual continúa tras la muerte.
Entrevista a Paloma Navarrete:
Una señora bien
....En su aspecto y maneras no tiene nada de friqui, todo lo
contrario, pero eso no le impide tener la facultad de comunicarse con los
muertos. Para controlar sus facultades se formó durante tres años con un chamán
en Guatemala y cuando volvió estudió astrología, quirología, cábala…, y fundó
el primer gabinete de futurología de la capital. Llevaba una doble vida de
científica y bruja. Trabajó con Jiménez del Oso y con el padre Pilón
investigando fenómenos paranormales, algunos muy mediáticos, como los del Reina
Sofía, donde halló la existencia de ataúdes y cadáveres tras sus blancos muros.
Cuenta experiencias y conclusiones en Experiencias en la frontera (Cúpula).
Tras la muerte, ¿seguimos viaje?
Sí.
¿Cómo lo sabe?
Me han dado algunas pistas desde el otro lado. Mi bisabuela,
a la que no conocí, se sentaba en mi cama por las noches, me arropaba, me daba
un beso y se iba.
Qué susto.
Yo creía que les sucedía a todos los niños, hasta que se lo
conté a mis amigas y me dijeron que era una mentirosa. A partir de los 12 años
el más acá me tuvo muy ocupada, sólo utilizaba mis capacidades para averiguar
lo que iba a caer en los exámenes.
¿Y traficaba con las preguntas?
De una manera tremenda. Me casé con un diplomático,
embajador en Guatemala. Allí un chamán me enseñó a ordenar mis capacidades,
desarrollarlas y utilizarlas.
¿Para qué?
Para ver el futuro y comunicarme con los del otro lado que
de alguna manera siguen ahí, sin cuerpo pero con identidad. Suelen tener algo
pendiente o están perdidos.
¿Qué pasó cuando volvió a España?
Seguí con mi tema de farmacia y en paralelo monté un
gabinete de futurología. He colaborado con policías en busca de desaparecidos,
de secuestrados; y trabajé con el padre Pilón y su Grupo Hepta y el Equipo 13.
¿Con buenos resultados?
Sí. Ayudé a las Abuelas de la Plaza de Mayo a saber de sus
seres queridos secuestrados por la dictadura militar. Fue duro porque la
mayoría, pude verlo, fueron lanzados desde un avión, enterrados en cal viva…
Pero vi como uno pudo escapar, les di las características y les dije que
aparecería al cabo de un año.
¿Somos allí como hemos sido aquí?
Nos vamos con la misma personalidad, con el mismo carácter,
y vamos evolucionando y elevando la vibración energética.
Los malos ¿siguen siendo malos?
No, pero esas personas tienen una energía tan densa que les
cuesta mucho refinarla.
¿Y qué pasa con los animales?
Fui con el padre Pilón a una casa en la que se oían pasos,
se abrían y cerraban puertas y los juguetes de los niños se desordenaban solos.
Saqué mi bola de cristal, que es el medio que utilizo para comunicarme.
¿…Y?
Vi a un chico de 12 años enfadado porque no tenía a nadie
con quien jugar. Supimos después que era el hijo de los antiguos dueños de la
casa, muertos en accidente de coche.
¿Qué hizo?
Llamé al abuelo para que viniera a buscarle. Vino, pero el
niño no le hizo ni caso. Entonces apareció un perro de lanas. Cuando se
encontraron todo fueron besos y abrazos. Ese perro estaba esperando a su amo y
fue él el que se lo llevó tras de sí. Las mascotas que han tenido una relación
de amor con los humanos persisten en el otro lado.
Suena a película de Disney.
Sí, patrañas, pero luego vamos al registro, comprobamos
datos, vemos fotos… Ellos, los del otro lado, nunca mienten.
¿Pero qué sentido tiene todo esto?
Ayudarles a seguir su viaje, aprender sobre la conciencia
humana y averiguar cómo es la realidad en la que viven.
¿Qué hay de relevante?
Que existe una pervivencia de esa conciencia individual
cuyas posibilidades y potencialidades se multiplican muchísimo. Estoy
convencida de que la física cuántica nos va a dar muchas respuestas, y que todo
lo que yo he visto y veo ya no será un disparate.
Cuénteme algún caso excepcional.
Nos llamaron del Reina Sofía, los vigilantes de seguridad
estaban aterrorizados porque por las noches se les aparecía un fantasma (al que
llamaron Ataúlfo), y los ascensores, todos ellos desconectados del cuadro
eléctrico, se ponían en marcha solos. Recorrí el museo y vi en una pared blanca
dos muertos asomados.
¡Qué miedo!
Un hombre y una mujer. Estaban enfadados. El jefe de
seguridad que nos acompañaba me explicó entonces que el museo había sido un
hospital fundado con el beneplácito de Carlos III por una monja y un cura.
Ellos.
Sí. Durante las obras encontraron los féretros del cura y la
monja y como no sabían dónde meterlos los colocaron en ese sótano en la pared y
levantaron un muro de pladur.
Los fantasmas estaban molestos, claro.
Enfadadísimos. Se los llevaron y los enterraron en el
cementerio de la Sacramental de San Isidro. El Reina Sofía es un edificio
público y se pudo verificar todo lo que vi.
¿Y Ataúlfo?
Llegamos a otra sala y vi nítidamente a una serie de
personas vestidas con camisones sucios, atadas a la pared con cadenas y
gritando como locas. Uno se volvió hacia un lado y le dio un mordisco al
vecino. “Esta era la sala de locos furiosos”, dijo el jefe de seguridad.
“Cuando hicimos la remodelación quitamos las cadenas y las argollas de la
pared”.
¿Y eso cómo se soluciona?
Yo estaba viendo una impregnación, pero el del mordisco era
un loco que seguía paseándose: Ataúlfo. No quería irse, y ahí está, puede ir a
conocerlo.
*Fuente, y cortesia de la nota: guiacuerpomente.com
Libro (pdf) "COMO LEER EL CUERPO", Manual de diagnosis oriental.
Por Wataru Ohashi y Tom Monte.
Se han escrito distintos libros donde se explica que nuestro
cuerpo es un reflejo de nuestra personalidad.
La energía de cada ser es la base para moldear poco a poco nuestro
cuerpo físico. En este caso Wataru Ohashi hace un diagnóstico oriental de
nuestros rasgos. Este escritor japonés emigró a Estados Unidos en 1970, y ha
escrito 6 libros.
Sinopsis del libro:
Mucho antes de que existieran los aparatos de rayos X, los
escáners y los análisis de sangre, los sanadores tradicionales empleaban
métodos no agresivos para determinar el estado de salud, el talento y el
carácter. De estos conocimientos nació un profundo aprecio por la unidad de
cuerpo, mente y espíritu. Para el diagnosticador oriental, el cuerpo es la
manifestación física del alma. Cuerpo y alma son uno. El cuerpo es a la vez
síntoma y símbolo del espíritu.
La diagnosis oriental es el arte de ver lo profundo bajo la
superficie; de revelar la verdad interior. En este libro voy a hablar no
solamente de nuestra salud sino también de nuestra naturaleza interior, tal y
como se revela en las características físicas de nuestro cuerpo. Esto le
servirá para adquirir una percepción profunda de su verdadera naturaleza. Vamos
a dejar de lado los viejos prejuicios, sentimientos de culpa y malos
entendidos, para ver un ser más profundo y fundamental.
Todas las personas buscamos respuestas a los interrogantes
más importantes de la vida: ¿Quién soy? ¿Cuáles son mis fuerzas? ¿Cuáles son
mis debilidades? ¿Cuál es la orientación de mi vida? Le voy a enseñar a leer su
cuerpo como si fuera un libro en el que estuvieran escritas las respuestas a
estas preguntas.
Mi objetivo es mostrarle sus puntos buenos, aquellos
aspectos en los cuales es usted fuerte, evolucionado y dotado. Deseo que sepa
qué es lo que está bien en usted, y que al mismo tiempo desarrolle un aprecio
profundo por su propia persona.
Cuanto más conocemos nuestras fuerzas, con mayor facilidad
podemos elegir caminar en la dirección de nuestros talentos y felicidad. El
conocimiento mejora la calidad de nuestra vida. No creo que se deba cambiar
para ser feliz. Más bien, es necesario conocer y cultivar lo que está bien en
uno. Ya poseemos todo lo que necesitamos para ser felices.
Descarga el libro en formato Pdf en el siguiente link
(dale click en el titulo del libro y guarda directamente a tu computadora):
".....No hay nada más glorioso que iniciar el recorrido de nuestra
senda. Nuestro corazón arde con todas las posibilidades, damos ese pasito hacia
lo desconocido. Temblando, pero vivos, caminamos.
Nunca se trató de que llegáramos al final, de llegar a la
meta, siempre fue acerca de enamorarnos de cada comienzo. Y la vida es siempre
un comienzo. Cada paso, cada aliento, cada nuevo día, cada invitación a
rendirnos, cada atardecer, cada amanecer, cada ola de alegría o tristeza, cada
oportunidad para confiar.
Las olas del océano no terminan, simplemente se disuelven en
su océano, en su Fuente, elevándose de nuevo, cayendo, jugando como niños del
infinito, acogidos por un amor inefable. Desde el punto de vista de la Fuente,
nada ha pasado, excepto esta danza. Los finales son comienzos y los comienzos
son finales, aquí, en la inmensidad de la presencia.
En la intersección, nos reunimos. Yo no te conozco a ti, y
tú no me conoces a mí. Reunidos por el destino o el azar, bailamos en las
profundidades del océano.
Se abren las puertas del corazón a un nivel más profundo en ustedes. Una nueva inyección coronal solar. Les ayudara a abrir registros ancestrales de su ser. Que aún se están manifestando en ustedes.
Y en las próximas horas y días. Tomaran conciencia de como ustedes viven y reciben la directa influencia de sus clanes familiares....
Muchos de ustedes sienten ser negados por sus entornos.
Y por ello en cortas edades renuncian a ser ustedes mismos para encajar o ser parte de ese clan.
Ahora. Descubrirán muchos secretos familiares. La luz entrante sacara a la luz....todos los procesos de luz u de apertura en ustedes.
Para que sean conscientes. Que todo lo que sucede tiene un para que, y como de alejados del corazón estuvieron los miembros de su familia. No por maldad, sino por tristeza, agotamiento olvido de si...la nueva energía solar, les ayudara a cerrar un mundo de juicio que les ausentan de su verdadero propósito de vida. Y les acompañan a renacer en la comprensión y el mayor real.
Toda verdad es la llave a la comprensión universal de cada ser.
Su propósito en Gaia en este momento es la aceptación y reconocimiento de la verdad de su ser interno.
Amada niña. Son seres de luz. Llenos de vida. Inmensa. Perfecta. Equilibrada. Y sin límite, para ello han de recordad y aceptar su capacidad innata en su trabajo.
Liberar los patrones mentales que les aíslan de su esencia de verdad y creatividad.....
Desde el amor y la comprensión. Puede que se sientan extrañamente desapegados de cosas como sin memoria..…lejanos a todo el ruido del entorno.
Ahí realmente es donde descubrirán. Que no es desapego. Sino observación y respeto de lo que ya es por sí mismo. Sin intensificar las situaciones al extremo.
Desde el respeto a su libre albedrio y al de cada ser que, sientan el presente en el aquí y el ahora.., con paz.
La paz y la alegría de vivir. Es aquello que les ayudara a vibrar y formar parte de. En aquel punto de partida. Que ustedes llaman 5 dimensión, la multidimensionalidad.
Pero que realmente todas las dimensiones son una. No hay partición.
Ellas están en ustedes y ustedes en ellas..... Vibrar. Reír. Amar, son las llaves de la multidimensionalidad. para entrar en un estado de conciencia libre de patrones mentales y estar en un flujo mental emocional libre y creativo.
Son co-creadores de todo cuanto les rodea. Incluso en los momentos más oscuros de su ser y más serenos de su alma...siempre están creando, la llave es ahora trabajarlo desde la conciencia
Amada niña.... Es tiempo de dar espacio a las creaciones del alma ancestral en equilibrio, y de aflora la verdad de cada uno de ustedes en amor...
Les amamos desde el sol de Alcyon .María Sananda y Melchisedek.
*Fuente, cortesia y autoria de la nota: ascensiongaia.es
EJERCICIOS PRÁCTICOS DE ECKHART TOLLE PARA CADA MES DEL AÑO
ENERO
De las cosas pequeñas a las cuales honramos y proporcionamos
cuidados nacen las cosas grandes. La vida de todas las personas está hecha de
detalles. La grandeza es una abstracción mental y una fantasía del ego. La
paradoja está en que la base de la grandeza está en honrar los detalles del
presente en lugar de perseguir la idea de la grandeza. El momento presente
siempre es pequeño en el sentido de que siempre es simple, pero en él se
encarna el mayor de los poderes. Es sólo cuando estamos en consonancia con el
momento presente que logramos acceso a ese poder.
En lugar de esforzarte en pos de la “grandeza”, dale honra y
cuidado a lo que forme tu realidad en ese instante. Haz de esto la práctica
espiritual de este mes.
FEBRERO
Haz una lista de tus quejas habituales y sobre la frecuencia
en la que te quejas de cosas durante el día. Presta especial atención al
quejarse sin un propósito de enmienda, ese tipo de queja que no provoca un
cambio positivo en una situación o en una persona. Por ejemplo, el quejarse del
tráfico, el tiempo, el tener que esperar en una cola o al teléfono. También
quejas sobre algo que alguien hizo o dijo (o por el contrario no hizo o no
dijo), quejas sobre tu pareja, el trabajo, la economía, la salud y determinados
grupos de personas. Nota esa voz que articula la queja en tu mente. Nota que
sólo está intentando llevar la razón, sentirse superior o sentirse más separado
del resto. Cada vez que notes esta voz quejándose, pregúntate si puedes
aceptarla como lo que es en realidad: un patrón antiguo en tu mente, la voz del
ego. No es quien tú eres en realidad. ¿Quién eres tú entonces?… Eres el/la que
reconoce la voz.
MARZO
La mente existe en un estado de «nunca tener suficiente»,
por lo que siempre ambiciona más. Cuando te identificas con la mente, te
aburres y te inquietas fácilmente. El aburrimiento significa que la mente tiene
hambre de nuevos estímulos, de más alimento para el pensamiento, y que su
hambre no está siendo satisfecha.
Este mes, cuando te sientas aburrido e inquieto, observa la
sensación de estar aburrido e inquieto. A medida que vayas dándote cuenta de
estas sensaciones, empezará a surgir algún espacio y quietud en torno a ellas.
Al principio sólo habrá un poco, pero, conforme crezca la sensación de espacio
interno, el aburrimiento empezará a disminuir en intensidad y significado. De
modo que incluso el aburrimiento te puede enseñar quién eres y quién no eres.
ABRIL
Emplea tus sentidos plenamente. Trata de estar donde estás.
Mira a tu alrededor. Simplemente mira, sin interpretar. No son los pensamientos
lo que te interesa, sino el acto mismo de la percepción. ¿Puedes separar el
pensamiento de la percepción? ¿Puedes mirar sin que la voz de tu cabeza
comente, saque conclusiones, compare o intente explicar algo? Observa la luz,
las formas, los colores, las texturas. Sé consciente de la presencia silenciosa
de cada cosa. Sé consciente del espacio que permite que cada cosa sea. Escucha
los sonidos; no los juzgues. Algunos sonidos pueden ser naturales –agua,
viento, pájaros- y otros son artificiales. Unos pueden ser agradables y otros
desagradables. Pero no diferencies entre bueno y malo. Deja que cada sonido sea
como es, sin interpretarlo. Escucha el silencio debajo de los sonidos. Cuando
miras y escuchas de este modo, puede que percibas una sutil sensación de calma,
que al principio casi no se nota. Algunas personas la sienten como una quietud
de fondo. Otras la llaman paz. Cuando la conciencia ya no está totalmente
absorbida por el pensamiento, parte de ella permanece en su estado original sin
forma, no condicionado. Esto es el espacio interior.
MAYO
Imagina que alguien te dice algo grosero o con intención de
molestarte. En lugar de caer en la reacción inconsciente y en la negatividad,
en lugar de atacar, ponerte a la defensiva o retirarte, deja que las palabras
te atraviesen limpiamente. No ofrezcas resistencia. Es como si ya no hubiera
nadie que pudiera sentirse herido. Eso es perdón. Así es como te vuelves
invulnerable.
Tanto si se trata de una alarma de automóvil, de una persona
grosera, de una inundación, un terremoto o la pérdida de todas tus posesiones,
el mecanismo de resistencia es el mismo.
Permite que el ruido, la grosería, o cualquiera que sea la
causa de la reacción negativa, te atraviese. Ya no golpea con una “pared”
sólida en tu interior. Siéntete como si te estuvieras volviendo transparente,
por así decirlo; como si no tuvieras la solidez de un cuerpo material.
JUNIO
¿Pasas buena parte de tu vida esperando? Esperar es esperar
a las próximas vacaciones, a tener un trabajo mejor, a que crezcan los niños, a
establecer una relación significativa, a triunfar, a hacer dinero, a ser
importante, a iluminarte.
La espera es un estado mental. Significa que quieres el
futuro y no quieres el presente. No quieres lo que tienes y quieres lo que no
tienes. Cuando esperas estás creando un conflicto inconsciente entre tu aquí y
ahora –el lugar donde estás-, y el futuro proyectado –el lugar donde quieres
estar-.
Puedes mejorar tu situación de vida, pero no puedes mejorar
tu vida. La vida es lo primario, es tu Ser interno más profundo. Ya es total,
completa, perfecta.
Renuncia a la espera como estado mental. Cuando te
sorprendas (este mes) cayendo en el estado de espera…, sal inmediatamente. Ven
al momento presente.
JULIO
Tiempo y mente son inseparables. Retira el tiempo de la
mente y esta se para. Estar identificado con la mente es estar atrapado en el
tiempo, mediante el recuerdo y la anticipación. El pasado te da una identidad y
el futuro contiene una promesa de salvación, de una realización de algún tipo.
Ambas son ilusiones.
Cuanto más te enfocas en el tiempo –pasado y futuro- más
pierdes el ahora, lo más precioso que hay. La vida es ahora. Es tu único punto
de acceso al reino informe e intemporal del Ser.
Sal de la dimensión temporal lo más posible en la vida
cotidiana. Si te resulta difícil entrar directamente en el ahora, comienza
observando la tendencia mental habitual a escapar de él. Haz morir el pasado
cada momento. No lo necesitas. Refiérete a él sólo cuando sea absolutamente
relevante para el presente. Observarás que el futuro suele imaginarse como
mejor o peor que el presente. Si el futuro imaginario es mejor, te dará
esperanza o expectativas placenteras. Si es peor, crea ansiedad. Ambas son
ilusorias. La auto observación permite la entrada automática de más presencia
en tu vida.
AGOSTO
El silencio es un portador de la presencia aún más poderoso
que las palabras. Escuchar el silencio, donde quiera que estés, es un modo
fácil y directo de estar presente. Aunque haya ruido, siempre hay silencio en
medio y por debajo de los sonidos. Escuchar el silencio crea inmediatamente una
quietud dentro de ti. Sólo la quietud interna puede percibir el silencio
externo. ¿Y qué es la quietud sino presencia, conciencia liberada de las formas
de pensamiento?
Ser consciente de la calma significa estar inmóvil. Estar
inmóvil es estar conscientes sin pensamientos. Nunca eres tan esencialmente,
tan profundamente tú mismo como cuando estás en calma. Cuando estás en calma,
eres quien eras antes de asumir temporalmente esta forma física y mental
llamada persona. Eres también quien serás cuando la forma se disuelva.
SEPTIEMBRE
Haz una lista de las actividades diarias que realices con
frecuencia. Incluye actividades que consideres que no tienen importancia o que
son aburridas, tediosas, irritantes o estresantes. No incluyas nada que de
verdad odies o detestes hacer ya que en ese caso será necesario básicamente
aceptarlas o dejarlas de hacer. La lista puede incluir cosas como ir al trabajo
y volver, hacer la compra, hacer la colada, o cualquier cosa que encuentres
aburrido o estresante de la vida cotidiana. Entonces cuando estés en mitad de
la realización de dichas actividades, utilízalas como un vehículo para estar
despierto, un vehículo para esta alerta. Concéntrate al máximo en la actividad
y siéntete verdaderamente presente, además toma conciencia de la quietud que
hay de fondo detrás de la actividad. El objetivo es traer conciencia a las
actividades cotidianas y gracias a ello ser capaz de encontrar el disfrute en
ellas, el gozo del Ser.
OCTUBRE
Las identificaciones más habituales del ego guardan relación
con las posesiones, con el trabajo, con tu estatus y reconocimiento social, con
el conocimiento y la educación, con la apariencia física, con las habilidades
personales, con las relaciones, con tu historia personal y familiar, con los
sistemas de creencias y también con las identificaciones colectivas:
nacionales, raciales, religiosas y otras. Ninguna de estas identificaciones
eres tú.
La identificación con la mente crea una pantalla opaca de
conceptos, etiquetas, imágenes, palabras, juicios y definiciones que bloquean
toda verdadera relación. Esa pantalla se interpone entre tú y tú mismo, entre
tú y tu prójimo, entre tú y la naturaleza, entre tú y Dios; crea la ilusión de
separación, la ilusión de que tú y el “otro” estáis totalmente separados.
El ego no quiere que se ponga fin a sus “problemas” porque
estos son parte de su identidad. ¿Quién serías sin tu infelicidad?
Cuando ya no hay nada con lo que identificarse, ¿quién eres
tú?
NOVIEMBRE
Este mes, cuando estés con otras personas, en el trabajo,
con la familia o en algún otro lugar, préstales toda tu atención. El motivo
original para relacionarse con la persona (comprar o vender algo, solicitar o
proporcionar información, etc.) pasa a ser secundario. Practica el no querer
nada de la gente que te rodea. Simplemente estar con ellos, estar presente.
El ver y escuchar “de verdad” a los demás será tu práctica.
Presta atención a tu propia capacidad o incapacidad de estar totalmente
presente con los demás. Toma conciencia de la voz en tu cabeza que te distrae
del momento presente. Date cuenta del campo de Presencia que se genera entre tú
y esa persona. ¿Qué cambios notas en la interacción?
DICIEMBRE
El dolor que creas en el ahora siempre surge de una falta de
aceptación, de una resistencia a lo que es. La intensidad del dolor depende del
grado de resistencia al momento presente, y ésta a su vez depende de lo fuerte
que sea tu identificación con la mente. La mente siempre trata de negar el
ahora y de escapar de él.
Trabaja siempre a favor del momento presente, no contra él.
Haz del presente tu amigo y aliado, no tu enemigo. Esto transformará
milagrosamente tu vida.
Una práctica espiritual simple pero radical es aceptar lo
que surja en el Ahora, dentro y fuera.
Acepta cualquier cosa que contenga el momento presente como
si la hubieras elegido.
Averigua si tienes algún problema en este momento. No
mañana, ni dentro de diez minutos, sino ahora. ¿Tienes un problema ahora?
Cuando aceptas profundamente este momento tal como es –tome
la forma que tome-, estás sereno, estás en paz. Cuando aceptas lo que es, cada
momento es el mejor. Eso es iluminación.
*Fuente, cortesia y autoria de la nota: luzarcoiris.com
Un universo de amor, abundancia y prosperidad puede
ser alcanzado por aquellos que están dispuestos a cumplir las leyes del Universo, y hacer uso
de las herramientas que tenemos a nuestra disposición para lograrlo. Tus
palabras, tus sueños, y tus pensamientos tienen el poder de crear condiciones
en tu vida. Debes entrenar tu mente para conseguir todas tu metas, y para ello necesitas conocer y practicar las herramientas disponibles para ello.
La siguiente es una guia para aprender a utilizar la ley de la atraccion a nuestro favor y asi empezar a manifestar nuestros deseos:
“No es tu trabajo hacer que algo suceda, tu trabajo es
soñarlo y dejar que suceda. La Ley de Atracción lo hará suceder. En alegría,
crea algo y mantén tu vibración en ello, el Universo encontrará la forma de
dártelo. Esa es la Ley de Atracción.”
"La diferencia entre un valiente y un cobarde no radica
en que el valiente no sienta miedo y el cobarde sí; no, esa no es la
diferencia. Ambos sienten miedo, en la misma medida. Entonces ¿cuál es la
diferencia? La diferencia es que el valiente sigue adelante a pesar de su
miedo, y al cobarde le detiene el miedo. ¡Ambos sienten miedo!
Si encontraras una persona que no sintiese miedo, ¿cómo ibas
a considerarla valiente? Sería una máquina, no un hombre. Solo las máquinas
están exentas de miedo; pero no se puede decir que las máquinas sean valientes.
¿Cómo vamos a considerar «valiente» a una máquina?
Ser valiente es actuar a pesar del miedo. El miedo está ahí,
el temblor está ahí, pero no te detiene; no te bloquea. Lo utilizes como un
trampolín y, a pesar del miedo y del temblor, entras en lo desconocido.
Ambas posibilidades, el miedo y el valor, existen en todos
los seres humanos. Todo dependerá de cuál de ellas elijas. Nunca elijas el
miedo, el miedo mutila, paraliza, te destruye sin posibilidad de resurrección.
El valor también te destruirá; te destruirá tal como eres, pero esa destrucción
será creativa, te proporcionará un renacimiento.
Tanto el miedo como el valor, destruyen; pero el miedo solo
destruye. La semilla, simplemente, se pudre. Cuando siembras la semilla del
valor, también muere, pero no se pudre. Muere… muere para dar lugar a un nuevo
fenómeno, de ella surge un retoño.
El valor, al igual que el miedo, también te matará; pero el
miedo te matará y no te proporcionará una nueva vida. El valor sí te
proporcionará una nueva vida. Elige el valor; elige siempre el valor.
Es duro, pero también aventurero. Es difícil, incómodo,
inconveniente, pero también proporciona grandes éxtasis. Es el precio que hay
que pagar por esos éxtasis…"
~ Osho.
La vida es inseguridad. Cada momento nos lleva a una inseguridad
cada vez más profunda. Es un juego en el que nadie sabe cuál será el siguiente
paso. ¡En esto radica la belleza de la existencia! Si fuera predecible, no
valdría la pena vivir la vida; si todo fuera tal y como deseáramos que fuese y
no hubiese lugar para la incertidumbre, no seríamos seres humanos sino
máquinas, ya que solo para ellas todo es seguro y cierto.
El hombre vive en
libertad. La libertad necesita inseguridad e incertidumbre.
LIbro en formato PDF "EL MIEDO Y COMO TRASCENDERLO":
“Si yo no pienso en mí, quién lo hará…Si pienso en mi, quién soy”.
Autoestima y egoismo son tomados generalmente como términos
antagónicos, aunque ambos comparte un significado muy emparentado: la idea de
quererse, valorarse, reconocerse y ocuparse de sí mismo.
Sabemos dónde está cada cosa y cada persona que queremos,
pero muchas veces no sabemos dónde estamos nosotros. Nos hemos olvidado de
nuestro lugar en el mundo. Podemos ubicar rápidamente el lugar de los demás, el
lugar que los demás tienen en nuestra vida, y a veces hasta podemos definir el
lugar que nosostros tenemos en la vida de otros, pero nos olvidamos cuál es el
lugar que nosotros tenemos en nuestra propia vida.
Nos gusta enunciar que no podríamos vivir sin algunos seres
queridos. Yo propongo hacer nuestra la irónica frase con la que sintetizo mi
real vínculo conmigo:
"No puedo vivir sin mí."
La primera cosa que se nos ocurre hacer con alguien que
queremos es cuidarlo, ocuparnos de él, escucharlo, procurar las cosas que le
gustan, ocuparnos de que disfrute de la vida y regalarle lo más que quiere en
el mundo, llevarle a los lugares que más le agradan, facilitarle las cosas que
le dan trabajo, ofrecerle comodidad y comprensión.
Cuando el otro nos quiere, hace exactamente lo mismo
Ahora, me pregunto: ¿Por qué no hacer estas cosas con
nosotros mismos?
Seria bueno que yo me cuidara, que me escuchara a mi mismo,
que me ocupara de darme algunos gustos, de hacerme las cosas más fáciles, de
regalarme las cosas que me gustan, de buscar mi comodidad en los lugares donde
estoy, de comprarme la ropa que quiero, de escucharme y comprenderme.
Tratarme como trato a los que me quieren.
Pero, claro, si mi manera de demostrar mi amor es quedarme a
mereced del otro, compartir las peores cosas juntos y ofrecerle mi vida en
sacrificio, seguramente, mi manera de relacionarme conmigo será complicarme la
vida desde que me levanto hasta que me acuesto.
El mundo actual golpea a nuestra puerta para avisarnos que
este modelo que cargaba mi abuela, “la vida es nacer, sufrir y morir”, no sólo
es mentira, sino que además es mal intencionado (les hace el juego a alguno
comerciantes de almas).
"Si hay alguien que debería estar conmigo todo el tiempo, ese
alguien soy yo."
Y para poder estar conmigo debo empezar por aceptarme tal
como soy. Y no quiere decir que renuncie a cambiar a través del tiempo. Quiere
decir replantear la postura. Porque frente a algunas características de mí que
no me guste hay siempre dos caminos para resolver el problema.
El primero, el más común, es la solución clásica: intentar
cambiar.
El segundo camino, el que propongo, es dejar de detestar esa
característica y como única actitud, permitir que, por sí misma, esa condición
se modifique.
Incluso para cambiar algo el camino realmente comienza
cuando dejo de oponerme. Nunca voy a adelgazar si no acepto que estoy gordo.
El ejemplo que siempre pongo es una historia real que me
tiene como protagonista:
Yo suelo ser bastante distraído. Cuando tenía mi primer
consultorio, muy frecuentemente olvidaba las llaves, y entonces llegaba a la
puerta y me daba cuenta de que había
olvidado el llavero en mi casa. Esto generaba un problema, porque tenía que ir
al cerrajero, pedirle que me abriera, hacer un duplicado de la llave. Era toda
una historia.
La segunda vez que me pasó decidí, furioso, que no podía
pasarme más. Así que puse un cartelito en el parabrisas de auto que decía:
“llaves”. Me subia al auto, veía el cartelito, entraba de nuevo en mi casa y me
llevaba las llaves. Funcionó muy bien las primeras cuatro semanas, hasta que me
acostumbré al cartelito. Cuando te acostumbras al cartelito ya no lo vez más.
Un día olvidé las llaves otra vez, así que le pedí a mi esposa que me hiciera
acordar de las llaves. Todas las mañanas ella me decía: “¿Llevas las llaves?”.
Pero el día que ella se olvidó, yo me olvidé y, por supuesto, le heché la culpa
a ella, pero de todas maneras tuve que pagar el cerrajero.
Un día me di cuenta de que, indudablemente, no había manera;
que yo era un despistado y que de vez en cuando me iba a olvidar las llaves.
Por lo tanto, hice una cosa muy distinta a todas las anteriores:
Hice varias copias de las llaves y le di una al portero, una
al heladero de la esquina (que era amigo mío), otra a una colega que tenía el
consultorio a cinco cuadras, enganché una con las llaves del auto y me quedé
con una suelta. Tenía cinco copias rondando por ahí.
Este relato no tendría nada de gracioso sino fuera porque, a
partir de ese día nunca más olvidé las llaves.
Todavia hoy el portero del departamento de la calle Serrano,
cuando me ve, me dice: “No se para que me dio esta llave si nunca la usó”.
La teoria paradojal del cambio dice que solamente se puede
cambiar algo cuando uno deja de pelearse con eso.
Y si mi relación conmigo me condiciona tanto por dejar de
vivir forzándome a ser diferente, imaginemos cómo condiciona mi relación con
los demás creer que ellos tienen que cambiar.
Uno de los aprendizajes ha hacer en el camino del encuentro
es justamente la aceptación del otro tal como es. Y eso sólo es posible si
antes aprendí a aceptarme.
El enorjarse con el otro por cómo es significa que, para que
yo pueda quererlo, tiene que ser como yo quiero que sea. Si tu amiga es
impuntual y la esperas una hora cada vez que te citas con ella, no te enojes.
¿Quién te obliga a esperarla? Cuando yo espero a alguien que es usualmente
impuntual, la razón de mi espera es porque elijo esperarlo y no porque él llegó
tarde. ¿Debo hacer responsable al otro de mis propias decisiones?
Mi esposa y yo decidimos hacer nuestra ceremonia de
casamiento a un horario inusual: la hora que realmente anunciaba la invitación.
Esperamos quince minutos. Más de la mitad de la gente nunca
llegó o, mejor dicho, llegaron mucho después y se quedaron como media hora en
la puerta pensando que nosotros todavía no habíamos llegado cuando, en
realidad, ya nos habíamos ido.
Son estilos, maneras de plantear las cosas.
Cada uno espera cuanto quiere esperar.
Tu concepto de la puntualidad es tuyo y yo no lo comparto.
No tienes que ser como yo, pero no me pidas que sea como tú.
Ser adulto significa hacerse responsable de la vida que uno
lleva, saber que las cosas que uno vive en gran medida las vive porque se ocupa
de que así sea y, a partir de allí, animarme a quererme incondicionalmente, por
egoísta que parezca.
Un día, mientras escuchaba a Enrique Mariscal, se me ocurrió
transformar un cuento suyo en este que llamé “El temido enemigo” y que quiero
volver a contarte aquí:
Había una vez un rey al que le gustaba saberse poderoso, y
deseaba que a su alrededor todos lo admiraran por su poderío.
Llamó un día a un sabio de la corte para preguntarle si
habia alguien más poderoso que él en el planeta, y el sabio le dijo que se
habia enterado de que vivía en el poblado un mago cuyo poder nadie más que él
poseía: sabía el futuro.
El rey hirvió de celos y empezó a preguntar sobre este mago.
Un día, cansado de que le contaran lo poderoso y querido que era el mago, el
rey urdió un plan: invitaría al mago a una cena y, delante de los cortesanos,
le preguntaría en qué fecha moriría el mago que había llegado al reino. En el
momento que respondiera, lo mataría con su propia espada para demostrar que el
mago se había equivocado en su predicción, se acabarían, en una sola noche, el
mago y el mito de sus poderes…
El día del festejo llegó y, después de la gran cena, el rey
hizo la pregunta:
– ¿Es cierto que puedes leer el futuro?
– Un poco -dijo el
mago.
– ¿Cuándo morirá el mago del reino?
El mago sonrió, lo miró a los ojos y contestó:
– Un día antes que el rey.
Al oir aquella respuesta, el rey no solo no se atrevió a
matarlo sino que, temeroso de que le pasara algo, lo invitó a quedarse viviendo
en el palacio con la excusa de que necesitaba un consejero sobre unas
decisiones reales.
Por la mañana, el rey mandó llamar a su invitado. Para
justificar su permanencia le hizo una pregunta; y el mago, que era un sabio, le
dió una respuesta correcta, creativa y justa.
El rey alabó a su huésped por su inteligencia y le pidió que
se quedara un día más, y luego otro más. Todos los días el rey se tomaba el
tiempo de charlar con el mago para confirmar de que estaba vivo y para hacer
alguna pregunta. Sentía que los consejos de su nuevo asesor eran tan acertados
que terminó, casi sin notarlo, teniéndolos en cuenta en todas sus decisiones.
Pasaron los meses y los años. Y como siempre, estar cerca
del que sabe vuelve al que no sabe más sabio… Así, el rey se fue volviendo poco
a poco más justo y dejó de necesitar sentirse poderoso. Reinó de un modo
bondadoso y el pueblo empezó a quererlo. Ya no consultaba al mago con la idea
de consultar su salud, realmente iba para aprender. Y con el tiempo, el rey y
el mago llegaron a ser excelentes amigos.
Hasta que un día, a cuatro años de aquella cena, el rey
recordó que el mago, a quien consideraba ahora su mejor amigo, había sido su
más odiado enemigo. Y recordó el plan urdido para matarlo.
Como no podía ocultar ese secreto sin sentirse hipócrita, se
dió valor, golpeó la puerta del mago y, apenas entró, le dijo:
– Tengo algo para contarte, mi querido amigo, algo que me
oprime el pecho.
– Dime -dijo el mago- y alivia tu corazón.
– Aquella noche, cuando te invité a cenar y te pregunté
sobre tu muerte, yo no quería saber tu futuro, planeaba matarte ante cualquier
respuesta que me dieras, quería que tu muerte desmitificara tu fama. Te odiaba
porque todos te amaban… Estoy tan avergonzado…
El mago le dijo:
– Haz tardado mucho en decírmelo, pero me alegra porque me
permite decirte que ya lo sabía. Era tan clara tu intención, que no hacía falta
ser adivino para saber lo que ibas a hacer… Pero como justa devolución a tu
sinceridad, debo confesarte que yo también te mentí. Inventé esa absurda
historia de mi muerte antes que la tuya para darte una lección que hasta hoy
estás en condiciones de aprender.
Vamos por el mundo odiando y rechazando aspectos de los
otros, y hasta de nosotros mismos, que creemos despreciables, amenazantes e
inútiles… y, sin embargo, si nos damos tiempo, terminamos viendo lo mucho que
nos costaría vivir sin aquellas cosas que en un momento rechazamos.
Nuestras vidas estan ligadas por la amistad y la vida, no
por la muerte.
El rey y el mago se abrazaron y festejaron brindando por la
confianza de esa relación que habían construido juntos.
Cuanta la leyenda que, esa misma noche, misteriosamente, el
mago murío mientras dormía, y que al enterarse, el rey cavó con sus propias manos
un pozo en el jardín, justo debajo de su ventana, y que allí se quedó llorando
al lado del montículo de tierra hasta que, agotado por el llanto y el dolor,
volvió a su habitación.
Cuenta la leyenda que esa misma noche, veinticuatro horas
después de la muerte del mago, el rey… murió en su lecho mientras dormía.
Quizá por casualidad… Quizá por dolor… Quizá para confirmar
la última enseñanza del maestro.
Este cuento es la expresión de dos cosas: el amor y el
egoísmo.
Se supone que el egoísmo es patológico cuando va en desmedro
del otro, cuando me impide compartir. Pero ¿Por qué el otro se vería dañado y
afectado por el hecho de que yo me quiera mucho?
Sabemos ya que el amor no se agota, que mi capacidad de amar
es ilimitada y, por lo tanto, que es ridículo pensar que por quererme mucho a
mí mismo no me va a quedar espacio para querer a los demás.
Con el egoísmo pasa exactamente lo mismo que lo que le
pasaba al rey con el mago.
El egoísmo es para mí un mago poderoso, capaz de revelarnos
algunas verdades sobre nosotros mismos. Pero vivimos rechazándolo, lo queremos
matar, sin darnos cuenta de que no podríamos vivir sin él.
Si conseguimos, como en el cuento, hacernos amigos del mago,
amigarnos con nuestro egoísmo, entonces no sólo podremos servirnos de él para
engrandecernos sino que podremos volvernos más generosos, más nobles, más
sabios, más solidarios y más inteligentes.
Todo lo que cada uno se quiere a sí mismo es poco. Con
seguridad, a todos todavía nos falta querernos más.
Ocurre que cuando el individuo se le prohíbe ser egoísta,
para encontar un lugar donde quererse, cuidarse y atenderse, se vuelve
mezquino, ruin, codicioso, canalla y jodido. El individuo se vuelve
despreciable porque cree que tiene que elegir entre él y el otro, y cuando se
elige a sí mismo cree que lo hace en contra de su moral. La idea que anima a
concebir el egoísmo como un desmedro de los otros es plantearse la vida como
una batalla mortal. Pero eso no siempre es cierto. Habrá habido, y seguramente
seguirá habiendo, batallas a muerte, pero analizar el mundo de este modo en
todo momento es una visión limitada con la cual no comulgo.
Hasta que el individuo no descubre su mejor egoísmo, el
poderoso mago dentro de él, no se da cuenta de que él es el centro de su
existencia y decimos entonces que está descentrado. Quiero decir, que vive y
gira al rededor de cosas externas, que hace centro en otras cosas.
Por supuesto, algunos
aspectos de nuestro mundo están compartidos; tú y yo podemos charlar, podemos
ponernos de acuerdo y también en desacuerdo, podemos tener espacios en el mundo
del otro y espacios comunes a los dos. Pero cuando tú te vas… te vas con tu
mundo y yo me quedo con el mío.
Si yo renuncio a ser el centro de mi mundo, alguien va a
ocupar ese espacio. Si giro alrededor tuyo empiezo a estar pendiente de todo lo
que digas y hagas. Entonces vivo en función de lo que me permitas, de lo que me
des, de lo que me enseñes, de lo que me muestres, de lo que me ocultes…
Y, por otro lado, cuando me doy cuenta de que soy el centro
del mundo de otro, me empiezo a asfixiar, me pudro, me canso y quiero escapar…
Mi idea del encuentro es: dos personas centradas en ellas
mismas que comparten su camino sin renunciar a su centramiento. Si no estoy
centrado en mí, es como si no existiera. Y si no existo, ¿Cómo podría
encontrarte en el camino?
¿Por qué es tan difícil aceptar esta idea del encuentro?
Porque va en contra de todo lo que aprendimos. Hemos
aprendido que si algo para ti es importante, debe serlo también para mí. Porque
estamos entrenados en privilegiar al prójimo.
Pero vengo yo, Jorge Bucay, y provoco, escandalizo, pateo la
puerta y digo: “¡Para nada! En realidad, lo que yo miro es más importante que
lo que mira el otro; mis ojos son prioritarios a los ojos del otro”.
Cada vez que explico este pensamiento, alguien salta
indignado: “¡Eso es egocéntrico!”. Y yo digo: “Sí, claro que es egocéntrico”.
Como todas las posturas individualistas, esta postura es egocéntrica. Es
individualista, egocéntrica y saludable, las tres cosas.
Indefectiblemente, para aprender esta idea del encuentro hay
que desandar la otra, la de la dependencia. Se nos mezclan, seguramente, pero
hay que seguir trabajando.
Hay que tener el valor de ser el protagonista de nuestra
vida. Porque si se cede el papel protagónico, no hay película.
Cuando estamos en una negociación, el otro puede decir muy
enojado: “Pero al final tú estás haciendo lo que a ti te conviene”.
Sí, estoy negociando para hacer lo que más me conviene a mí,
¿Para qué otra cosa negociaría?
¿Desde qué lugar negociaría si no me prefiriera a mí antes
que a ti.
Negocio con otro porque es imposible hacer todo lo que yo
quiero, y si pudiera hacerlo, sin dañar al otro, quizá lo haría. ¿Por qué no?
Puedo quererte y estar dispuesto a ceder un poco porque
además de quererme a mí te quiero a ti; pero entre los dos, no hay ninguna duda
de que me prefiero a mí.
No se nace sabiendo disfrutar el compartir, tampoco es
obligatorio, pero se puede aprender.
Al principio, la música clásica parece medio chirriante,
pero después se aprende a escuchar a Tchaicovsky; después ballet; y después, si
uno se anima un poquito más, empieza a encontrarle el placercito al barroco; y
después empieza a escuchar música sinfónica. Uno va educando su oído y no
pierde el gusto por lo anterior.
Cuando no hemos sido entrenados para mirar pintura, vemos un
cuadro famoso y no entendemos. Pero así como se aprende a escuchar música, se
aprende a entender pintura. Se lee sobre pintura y se aprende a mirar.
La moral también se aprende.
Nadie puede hacer que me guste Goya. Nadie puede obligarme a
que me guste Picasso, pero si yo aprendo, si yo crezco, si yo educo mi buen
gusto. Va a crecer la posibilidad de que me gusten esas cosas, voy a encontrar
aquello que realmente está ahí, par poder extraerlo y disfrutarlo.
Cuanto más disfruto, cuanto más placer soy capaz de sentir,
más entrenado está mi amor por mí. Si cuidarte y darte desde el amor me da
placer, por qué no pensar que es desde la búsqueda de este placer que yo actúo
y ejerzo el amor que te tengo.
Cómo no va a ser así, si el amor por ti proviene del amor
por mí.
Hay que darse cuenta de que hay en el mundo personas, cosas
y hechos muy importantes, pero ninguno más importante para mí que yo mismo.
Porque nos guste o no nos guste, repito, cada uno de nosotros es el centro del
mundo en el que vive.
Si en un grupo dices:
– Yo defiendo bien mis lugares porque tengo la autoestima
bien elevada.
el otro te dice:
– Oye, qué bien, ¿Quién es tu terapeuta?
En cambio, si dices:
– Yo defiendo muy bien mis lugares porque soy bien egoísta.
El otro te dice:
– ¡Estas loco Bucay! Cambia de terapeuta.
Apuesto con todo mi corazón por nosotros. Pero si vas a
forzarme a elegir…